La legislación, la escuela, la política, la economía actual, están construidas sobre una hueste en movimiento de metáforas, metonimias, antropomorfismos y supuestos realzados, extrapolados y adornados poética y retóricamente, a los que, por causa del prolongado uso, se los considera firmes, canónicos y vinculantes.
Estas metáforas se han vuelto gastadas y sin fuerza sensible; "son como monedas que han perdido su troquelado y no son ahora ya consideradas como monedas sino como metal". F. Nietzsche, Sobre verdad y mentira en sentido extramoral.
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